Algunas personas han considerado de mal gusto y ofensivo contra la comunidad socorrana las fotografias colocadas en nuestro artículo anterior. Sin entrar a discutir sobre esas apreciaciones mal fundamentadas, es necesario recalcar que nuestro objetivo parcialmente se ha cumplido. Y esto ha sucedido porque pretendemos llamar la atención sobre el poco interes existente, de aquella comunidad por mantener el interés de los extraños que circulan por la troncal norte respecto de lo que significa el Socorro ahora como simple elemento histórico.
En verdad, saber de Socorro casi que es una tarea exclusiva de especialistas y amantes de la historia decimonónica colombiana, lo que aunado al pobre espectaculo arquitectónico que presenta tan importante ciudad en su paso por dicha troncal, no se presta sino para el irreversible expectaculo del desinterés. Por ello es que pretendemos llamar la atención sobre este aspecto, más no la de imputar responsabilidades, ya que ese no es nuestro objetivo.
Otras personas y estas muy allegadas que desconocen por completo la cartografia histórica trazada sobre la Colombia del siglo XIX me piden no exagerar la importancia de "ese pueblo", intención nada más extraña y repudiable para mi.
Mi intención es el patriminio cultural como objeto general más que las particularidades históricas que rodean y enriquecen esos procesos, como es el caso específico del Socorro, sin embargo es imposible dejar de admirar como lo señala Jorge Orlando Melo en su artículo "la Evolución Económica de Colombia, 1830-1900" ese espectacular fenómeno que fue Socorro durante aquel periodo; de una parte, la segunda ciudad más poblada del país y de otro el centro político y económico del país, sin paragón aún en la historia contemporanéa colombiana.
Aunque infortunadamente solo se conozca por los hechos de la Revolución Comunera, su importancia política radica en lo sucesos vividos a lo largo del siglo XIX incluida su completa desaparición como fenómeno urbano en la última década de aquel siglo, por razones que infortunadamente son poco estudiadas y ampliamente desconocidas.
No pretendo historiar, ni cartografiar siquiera remotamente compendiar los sucesos socorranos que han trascendido la historia nacional. Esa es una monumental tarea que no pienso abrigar, simplemente trato de señalar que ese Socorro, "ese pueblo" fue el epicentro que permitió delinear un concepto político común de nación del cual con todos sus defectos es el que hoy nos rige y al que desafortunadamente hoy, incluidos quienes la habitan la desconocen casi por completo. Esa indiferencia e indolencia que se observa academica, política y socialmente sobre la ciudad es la que me interesa, toda vez que para los colombianos una de las principales fuentes de conocimiento histórico poco a poco esta desapareciendo sin ser identificada y menos estudiada.
Es lamentable como se destruyen fachadas y casas, testigos mudos de un mejor pasado que ya no existe pero que todavía se reconoce. Es increible observar como llegaron las universidades y antepusieron sus programas de ingenieria o jurídicos, por sobre disciplinas como la historia, la política, economía, restauración, archivistica etc. La indolencia es tan grave que nadie se inmuta ni se cuestiona por lo más preciable de los archivos socorranos que descansan en Bogotá o Bucaramanga. Una ciudad sin sus archivos es como una vida sin memoria: simplemente no existe.
Muchos se sorprendera que siempre hable de Socorro como "la ciudad" y sin el artículo determinad "el" y lo hago básicamente por dos razones. Una no se llama "El Socorro", el determinante es despectivo y sus habitantes de antaño jamás la denominaron así, su nombre fue Socorro. La otra razón porque el calificativo de ciudad implica vivencias, orientaciones, abrigo y eso fue sencillamente Socorro en el siglo XIX el lugar urbano que por excelencia formaba tendencias en el país ya fueran políticas, científicas o económicas. Una ciudad no es simplemente la acumulación anonima de identidades. Existen muchas ciudades de millones de habitantes que fuera del amparo que brinda el anonimato no tiene otra cosa que dar a sus habitantes. Es más, si el elemento diferenciador para llamar ciudad a un conglomerado humano fuera simplemente el de la sumatoria de individuos, uno podría decir que los 3 millones 500 mil habitantes de Ciudad Bolivar, Kennedy, Usme y Bosa forman un grupo urbano por excelencia, situación que no es así, muchos incluso se burlarian de ellos si se les pregunta de donde son y contestaran: Bogotanos, pues para otras personas aquellos no dejan de ser sino "del sur" y estar al margén de lo que se considera como urbano.
Observar la cuadricula entre las quebradas Jaboncillas y Guayacana que forma hoy dia Socorro y hasta hace muy poco sus naturales limites, no sorprende a nadie, pero lo fascinante de esto es que ¡esa misma cuadricula es la que existía hace cerca de 300 años!! cuando los poblados incluidos los más importantes no eran más que un par de casas y la propia capital no tenía más de 15 mil habitantes!!
Socorro tiene futuro, pero dependera fuertemente de como se consolide como lider de cara a la administración del nuevo parque natural Los Yariguies ya que allí esta su nueva fuente de vida. De un buen manejo de sus recursos hidrícos y demás nichos biologicos dependera su reaparición en la historia.
Sin embargo sería bueno que enseñara su historia e hiciera un gran esfuerzo por recuperar sus archivos hoy depositados en Bucaramanga y Bogotá, junto con una tarea ingente de autocuestionarse, sobre en ella ¿qué es lo que vale la pena conservar?.
Mis agradecimientos a todos aquellos que compartieron de una u otra forma este espacio, y sobre todo, deseo que los Socorranos actuales no sean inferiores a las exigencias historicas que los tiempos actuales demandan y esperan de ellos. Sus ancestros, quienes delinearon desde aquel lejano 1780, 1795, 1809, 1810 1816-19, 1840 y 1863 la estructura política de lo que sería este país, hubiesen trabajado con igual denuedo si estas circunstancias fueran las suyas. Así lo probaron una y otra vez.
Con lo anterior doy por terminado este agradable ejercicio de comentar en un sitio web sobre un apasionante tema que más que histórico es de pasión y valoración por lo que considero es el sitio fundamental de creación política que tiene el país y del cual, dada la situación política actual, academicos, estudiantes y políticos deberian consgrarse más a su estudio: La Ciudad de Socorro en el hasta ahora departamento de Santander.
En verdad, saber de Socorro casi que es una tarea exclusiva de especialistas y amantes de la historia decimonónica colombiana, lo que aunado al pobre espectaculo arquitectónico que presenta tan importante ciudad en su paso por dicha troncal, no se presta sino para el irreversible expectaculo del desinterés. Por ello es que pretendemos llamar la atención sobre este aspecto, más no la de imputar responsabilidades, ya que ese no es nuestro objetivo.
Otras personas y estas muy allegadas que desconocen por completo la cartografia histórica trazada sobre la Colombia del siglo XIX me piden no exagerar la importancia de "ese pueblo", intención nada más extraña y repudiable para mi.
Mi intención es el patriminio cultural como objeto general más que las particularidades históricas que rodean y enriquecen esos procesos, como es el caso específico del Socorro, sin embargo es imposible dejar de admirar como lo señala Jorge Orlando Melo en su artículo "la Evolución Económica de Colombia, 1830-1900" ese espectacular fenómeno que fue Socorro durante aquel periodo; de una parte, la segunda ciudad más poblada del país y de otro el centro político y económico del país, sin paragón aún en la historia contemporanéa colombiana.
Aunque infortunadamente solo se conozca por los hechos de la Revolución Comunera, su importancia política radica en lo sucesos vividos a lo largo del siglo XIX incluida su completa desaparición como fenómeno urbano en la última década de aquel siglo, por razones que infortunadamente son poco estudiadas y ampliamente desconocidas.
No pretendo historiar, ni cartografiar siquiera remotamente compendiar los sucesos socorranos que han trascendido la historia nacional. Esa es una monumental tarea que no pienso abrigar, simplemente trato de señalar que ese Socorro, "ese pueblo" fue el epicentro que permitió delinear un concepto político común de nación del cual con todos sus defectos es el que hoy nos rige y al que desafortunadamente hoy, incluidos quienes la habitan la desconocen casi por completo. Esa indiferencia e indolencia que se observa academica, política y socialmente sobre la ciudad es la que me interesa, toda vez que para los colombianos una de las principales fuentes de conocimiento histórico poco a poco esta desapareciendo sin ser identificada y menos estudiada.
Es lamentable como se destruyen fachadas y casas, testigos mudos de un mejor pasado que ya no existe pero que todavía se reconoce. Es increible observar como llegaron las universidades y antepusieron sus programas de ingenieria o jurídicos, por sobre disciplinas como la historia, la política, economía, restauración, archivistica etc. La indolencia es tan grave que nadie se inmuta ni se cuestiona por lo más preciable de los archivos socorranos que descansan en Bogotá o Bucaramanga. Una ciudad sin sus archivos es como una vida sin memoria: simplemente no existe.
Muchos se sorprendera que siempre hable de Socorro como "la ciudad" y sin el artículo determinad "el" y lo hago básicamente por dos razones. Una no se llama "El Socorro", el determinante es despectivo y sus habitantes de antaño jamás la denominaron así, su nombre fue Socorro. La otra razón porque el calificativo de ciudad implica vivencias, orientaciones, abrigo y eso fue sencillamente Socorro en el siglo XIX el lugar urbano que por excelencia formaba tendencias en el país ya fueran políticas, científicas o económicas. Una ciudad no es simplemente la acumulación anonima de identidades. Existen muchas ciudades de millones de habitantes que fuera del amparo que brinda el anonimato no tiene otra cosa que dar a sus habitantes. Es más, si el elemento diferenciador para llamar ciudad a un conglomerado humano fuera simplemente el de la sumatoria de individuos, uno podría decir que los 3 millones 500 mil habitantes de Ciudad Bolivar, Kennedy, Usme y Bosa forman un grupo urbano por excelencia, situación que no es así, muchos incluso se burlarian de ellos si se les pregunta de donde son y contestaran: Bogotanos, pues para otras personas aquellos no dejan de ser sino "del sur" y estar al margén de lo que se considera como urbano.
Observar la cuadricula entre las quebradas Jaboncillas y Guayacana que forma hoy dia Socorro y hasta hace muy poco sus naturales limites, no sorprende a nadie, pero lo fascinante de esto es que ¡esa misma cuadricula es la que existía hace cerca de 300 años!! cuando los poblados incluidos los más importantes no eran más que un par de casas y la propia capital no tenía más de 15 mil habitantes!!
Socorro tiene futuro, pero dependera fuertemente de como se consolide como lider de cara a la administración del nuevo parque natural Los Yariguies ya que allí esta su nueva fuente de vida. De un buen manejo de sus recursos hidrícos y demás nichos biologicos dependera su reaparición en la historia.
Sin embargo sería bueno que enseñara su historia e hiciera un gran esfuerzo por recuperar sus archivos hoy depositados en Bucaramanga y Bogotá, junto con una tarea ingente de autocuestionarse, sobre en ella ¿qué es lo que vale la pena conservar?.
Mis agradecimientos a todos aquellos que compartieron de una u otra forma este espacio, y sobre todo, deseo que los Socorranos actuales no sean inferiores a las exigencias historicas que los tiempos actuales demandan y esperan de ellos. Sus ancestros, quienes delinearon desde aquel lejano 1780, 1795, 1809, 1810 1816-19, 1840 y 1863 la estructura política de lo que sería este país, hubiesen trabajado con igual denuedo si estas circunstancias fueran las suyas. Así lo probaron una y otra vez.
Con lo anterior doy por terminado este agradable ejercicio de comentar en un sitio web sobre un apasionante tema que más que histórico es de pasión y valoración por lo que considero es el sitio fundamental de creación política que tiene el país y del cual, dada la situación política actual, academicos, estudiantes y políticos deberian consgrarse más a su estudio: La Ciudad de Socorro en el hasta ahora departamento de Santander.